ALAS DE ANGEL...
Dicen que, cuando un niño cierra los ojos en tu vientre,
un nuevo ángel nace en el cielo,
Que cuando sus manos se cierran en tu vientre,
dos alas se despliegan en la eternidad,
Que cuando un niño deja de palpitar,
un corazón limpio y puro late en el cielo,
Que cuando dos pies virginales dejan de moverse
un gran sendero, con flores y plantas, espera en lo más alto de la cumbre.
Dicen, que cuando un bebé deja de vivir,
El cielo lo recoge para que siga viviendo eternamente,
Porque toda criatura, es promesa e ilusión,
Es futuro y es siembra,
Es mañana y es sonrisa,
Es juego y ternura.
Y, por ello mismo, porque es esperanza,
Un bebé nunca deja de existir, sino que vive,
El destino no permite una obra inacabada,
No quiere que algo suyo se quede injustamente en el olvido,
Desea, que este mundo nuestro,
sea adornado por la belleza y la calidez,
la alegría y la espontaneidad... de tu bebé.
Por eso, cuando un pequeño cierra los ojos prematuramente,
Un nuevo ángel nace en el cielo,
Dos alas se despliegan en lo alto,
Un canto angelical se oye en el firmamento,
Un susurro celestial sostiene la tristeza del momento.
Hoy, un Ángel existe entre nosotros,
en nuestro corazón,
en nuestra esperanza y corazón de padres...